Estoy en casa, en el salón, la chimenea está encendida y la calefacción también. Lo del ahorro de energia parece que no va conmigo. Más bien parece que estés en medio del infierno en lugar de en el norte de Burgos. Aún así, lleva todo el día haciendo mal tiempo. Hace frio, llueve, el cielo está gris oscuro y hace un viento de los que hacen que todo el pelo se te alborote y del que te pone la nariz roja.
Antes, le veia mucho mas la gracia a esto del invierno, me gustaba, me hacia sentir un poro nórndica, un poco metida en otro mundo, me impregnaba de una "felicidad" tipo, voy-feliz-con-mis-botas-de-agua-y-mi-bufanda-a-juego-saltando-charcos-sin-preocuparme-de-mojarme.... Luego con el paso del tiempo a lo de que la ropa de invierno es un coñazo, capas, capas y mas capas y dentro una chica chiquitita achicharrada cuando entra en cualquier sitio de 4 paredes, se le sumó que el invierno es triste, conlleva tristeza y melancolía...las calles están vacias, la gente tiene mala cara, la nariz roja y las manos tiesas...
De todas, formas , estamos en primavera, los almendros de mi jardín están preciosos con sus flores blancas y los tulipanes han salido esta semana, unos hermosos tulipanes rojos y amarillos, con su tallo grueso y sus horas lisas y fuertes. Pero hoy ha hecho un día pésimo, de los que hacen que la gente se meta en casa y no salga ni para comprar el pan, de los que hacen que se te pegue el pelo al pintalabios rosa que te has plantado y de los que te hacen ver que la ropa que elegiste cuando pensaste, - bah, solo es un dia nublado- sea la peor opción del mundo!!
Como soy una persona positiva como las que mas, pienso que hay que disfrutar de todo, que no valorarias el buen tiempo sin estos dias, y que si te dijeran que ya no vas a vivir nunca mas un invierno te echarias las manos a la cabeza y llegarian a tu mente esas preciosas botas rojas de lluvia que te compraste en Noviembre, el gorro de lana blanco a juego con una bufanda, el que tiene un pompóm y que te queda tan bien, los abrigos y gabardinas colgados en las tiendas en septiembre esperando a que sople el viento y la gente arrase con ellos. Así que disfrutemos de estos días que abril nos está dando, abriguémonos con gusto y digamos con gusto cuando salga el sol eso de - que tiempo tan loco!-
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